Pinch-arte

 

     

  Pinch-arte es mi bar/restaurante elegido en las últimas semanas. Cierto es que sólo había ido una vez antes de llevar a Alex con mucha ilusión para que lo conociera, pero en mi primera impresión lo tenía todo!

• Está bien  situado, en Velazquez con María de Molina, el sitio está dividido en dos zonas en la entrada la barra donde puedes disfrutar de sus pinchos (no los he probado aún) y copas y la planta de arriba, que te sorprende por amplia (no te la esperas tan grande viendo lo pequeñito que es el bar) donde está la parte del restaurante.
• El servicio fue agradable, sin ser un servicio profesional (es en lo que suelo ser mas critica) Te hacen esperar en la barra de arriba a que el maitre te siente, no lo puede hacer ningún otro, cosa que no siempre entiendo ya que tuvimos que esperar un ratito de pie hasta que el maitre pudo venir aún estando claro que no había muchas reservas y si muchas mesas libres. Lo bueno es que no fue necesario estar todos para que nos sentasen (de 6 sólo estábamos 2)
• La carta esta basada en platos sencillos pero de una calidad aceptable (http://www.pinch-arte.es/carta_pinch-arte.pdf) Nosotros pedimos:
  • Parrillada de verduras (al centro)
  • Huevos rotos con gulas (al centro)
  • Entrecot / Solomillo / Hamburguesa (platos principales)
  • Coluant
  • Varias botellas de blanco Rueda Verdejo (no recuerdo cual)
• Las raciones son bastante grandes y por ello los platos principales los compartimos también entre 2 y la carne estaba exquisita y muy tierna. La hamburguesa no merecía tanto la pena
• El precio. Muy muy baratito no llega a los 23€/persona
• En la planta de abajo puedes tomas unas copitas muy agusto y sin que te duela el bolsillo

Parece perfecto, ¿no? Pues por eso mismo llevé allí a Alex, ¿y como fue nuestra cena? Regular

• El servicio fue agradable como la vez anterior pero de la carta ya no tenían muchos platos por que estaban en pleno proceso de cambio de carta y tenían casi mas platos fuera de carta que en ella.
• Pedimos 2 platos para compartir y nos los trajeron los dos a la vez, no indicamos que íbamos a compartir pero tampoco nos preguntó nadie
  • Sepia a la plancha: (En sustitución de una cazuela de mejillones que no tenían) Estaba un poco dura aunque no para dejar de comer por ello
  • Entrecot (en sustitución del secreto ibérico que se había acabado justo un minuto antes) Con zonas bastante duras, Alex se hizo daño de tener que apretar al cortarlo. Mi parte estaba menos dura pero dura al fin y al cabo. De sabor estaba buena, pero no se si lo suficiente como para merecer el esfuerzo
  • Como las raciones son hermositas decidímos no pedir postre
  • De beber tomamos cerveza (Vasos de sidra llenos, acabas antes la comida que la cerveza)
• La cuenta resultó muy económica, ya que no llegamos a 30€ los dos

Resolución final: Pendiente de conocer la nueva carta y la calidad que ofrecen